Con motivo de nuevo mobiliario instalado en el dormitorio de mi domicilio particular y la impericia del carpintero berreta que lo fabricó e instaló, la persiana rosa peligrosamente la mesa de luz. No, la mesa de luz no se puede cambiar de lugar. No, la cortina no se puede mover.
Este erótico contacto entre el contrapeso de la cortina y la firme madera de la mesa de luz deriva en un insoportable tic tic tic tic tic tic tic que hace las delicias de mis nervios.
Lo llamativo es que este ruido no es permanente pero incluso con las ventanas cerradas la cortina se balancea para hacerle el amor a la mesita. Entre los posibles motivos de esta cadencia se cuentan los siguientes: a) un fantasma; b) leyes físicas que expliquen que al movernos nosotros, una masa de aire se desplace y genere el movimiento descripto; c) la ausencia de topetina en la esquina de la puta mesita.
Si alguien sabe de un cazafantasmas de confianza por favor me avisa.
lunes, 29 de agosto de 2011
Bajame la persiana
Etiquetas: el mal entendido progreso, experiencias, odiados, reflexiones
lunes, 8 de agosto de 2011
Volveeeeeeeer, que ganas de volveeeeeeer
En los últimos días volví a hacer cosas que hace mucho tiempo no hacía, a saber:
- Escuchar un disco de Ricky Martin de punta a punta en repetidas oportunidades.
- A la mañana, después de bañarme y vestirme para salir, dormir una mini siestita.
- La tercera vendría a ser ésta
Etiquetas: reflexiones
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