Con miedo de que sea literal, escondido debajo de un toldito de una casa que vende paraguas y otras mil quinientas cosas, apunta su cámara al cielo con miedo a perderse la oportunidad.
Otros arrugan la nariz por temor a los efectos colaterales y todos encojen hombres y arrugan frentes. ¿Acaso así los teresos que se rieguen pegan menos?
La lluvia ya es parte del paisaje de la ciudad. Como los del Casino que se cagan a trompadas. ¿Cómo puede ser que hace 15 días que llueve en todos lados y no para?
Todos los días al laburo con el paraguas. Ahora falta nada más que me lo lleve al mediodía cuando salgo a almorzar, porque siempre empieza a llover cuando estoy volviendo.
¿Qué tan boludo puedo ser?
lunes, 10 de marzo de 2008
Lluvia de mierda
Etiquetas: experiencias, preguntas existenciales
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1 comentario:
Moraleja: Si se tiene auto, a no quejarse ¿?
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