lunes, 1 de septiembre de 2008

Hielo y chocolate

Cuando llego de la oficina a mi habitación del hotel, tengo una rutina bastante parecida: me saco el traje, acomodo las cosas de la oficina, voy al baño.
Si tengo tiempo, me tiro un ratito. Sino, me baño y salgo.

Siempre, pero siempre, pero todas las veces, cuando estoy en el baño tocan el timbre.


Pueden tocar el timbre por muchos motivos: porque se prende fuego el hotel, porque está lista la ropa que mandé a la lavandería, porque el hotel decidió regalarme una canasta con frutas... entre otras.

Siempre, pero siempre, pero todas las veces, es la estúpida que toca el timbre, abre la puerta y pregunta "Sr. desea hielo?. Chocolate?".

Qué le puedo contestar, todo agitado por haber salido rápido del baño para atenderla, todo agitado, asustado por el timbre, aterrado porque pensé que se prendía fuego el hotel y repasé rápidamente donde estaba mi pasaporte para agarrarlo y salir corriendo...


Nunca hace falta que le conteste nada.
Con la cara de culo que le pongo, alcanza y sobra.

Será que este hotel tiene cámaras y cuando ven que me meto en el baño me la mandan?

2 comentarios:

Luis dijo...

jaja, alguna vez he estado en un hotel, hay un cartoncito colgado en la manilla de la puerta con dos caras, una dice algo así como "no manches güey, ahorita no" y si la giras 180 grados (con un eje vertical), dirá algo así como "ándele güerita, a ver si me haces la room pliiissss".
A ver si te acuerdas cuando te metas al baño o a cualquier otra actividad que requiera sociego, de tomar ese cartoncito y colgarlo en la manija, claro, que sea visible desde fuera de la habitación ya que caso contrario sería más inútil que cenicero de moto!!

Pablo dijo...

Nada más incompatible que preguntar: Hielo o Chocolate...