viernes, 30 de octubre de 2009

Media estación

El calor sudafricano me rompe las pelotas, pero si es a la orilla de una pileta o con algo muy frío y rico, más o menos lo llevo.

El frío ártico es más lo mío: comida calentita, películas y pantuflas con forma de patas de animales y taparse con la frazada hasta acá...


Ahora, esto de calor agobiante pero siempre a punto granizar o de levantarse una tormenta de dimensiones fílmicas o que a entre la máxima y la mínima del día haya 40 grados de diferencia, es una conchudez de parte de alguien.

Frío extremo o calor desesperante. Las medias tintas dejémosla para países desarrollados con climatizadores automáticos, por favor.


No sé para que se inventó el televisor a colores con lo bien que se vive la vida en blanco y negro

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jueves, 29 de octubre de 2009

Tecnología inodora

No puedo entender a la gente que habla por teléfono sentada en el inodoro de un baño público, como si estuviera sentada en el living de su casa.


Esto está escrito desde el cubículo de al lado, sí... pero no es lo mismo.

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martes, 27 de octubre de 2009

Soy leyenda

Hoy fui al gimnasio SOLO.
No me refiero a que haya ido sin nadie que me acompañe.
No me refiero a que no compartí con nadie la rutina.

Estaba SOLO.

Pasé la tarjetita y no había nadie en la PB haciéndose el rudo, poniendo cara de que estar por morir. En el vestuario era el único.
Preocupado porque hubiera un cartel indicando que (otra vez) no había agua caliente o que las máquinas me electrocutarían, pregunté qué onda.
Me explicaron algo como que estuvo cerrado justo hasta antes de que yo entrara o algo así.
No lo recuerdo bien porque la felicidad me embriagaba.

Me imaginaba corriendo en la cinta sin el olor de ningún vecino, sin desviar la vista en ninguna gorda con ínfulas de doncella y la tanga clavada hasta la gargante, rajándome sutiles pedines km a km...

Me vestí rápido (sin nadie que me molestara en los bancos aledaños), dejé mi traje y mi mochila y me compré una Gatorade para festejar.

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lunes, 26 de octubre de 2009

1, 2, 3 probando

Aplaudo la publicidad de una marca de galletitas cada vez que la veo en la tele
Todos se preguntan uno a otros "todo bien?" y contestan de manual "sí, todo bien" aunque un colectivo les esté pisando la pierna hábil. De repente uno quiere contestar sinceramente y desde el corazón pero se queda solo sin que nadie escuche su respuesta.


La publicidad me hace gracia, no puedo no reirme mil veces aunque siempre pase lo mismo. Así soy yo, qué le voy a hacer...

Lo que pasa es que el "todo bien-todo bien" es simplemente una técnica para reconocerse con otro ser humano, asegurarse de que no se está delante de una ilusión óptica y recién ahí comenzar a charlar animadamante. O no, tampoco es obligación.

A mi abuela se lo tuvimos que suspender porque cuando hablamos por teléfono, al todobien-todobien porque inisiste en interrumpirlo con sus lamentos médicos, traumatológicos o de velorios de conocidos. La solución más sencilla que entendimos ante su necedad de ir en contra de las reglas básicas de convivencia, es pasar directamente del hola inicial de cortesía al tema en cuestión, pasando por alto la comprobación.

En la misma bolsa odiosa encolumno a los que tienen respuestas armadas al todobien del tipo "Sí. O querés que te cuente?".

Sin embargo ayer descubrí a un grupo de seres humanos aún más detestable.
Los que no usan esa frase para regocijarse en sus miserias y dolencias, sino todo lo contrario. Ayer intercambié un todobien que fue respondido con un "Todo magnífico"

...


Estamos locos?
Si no me importa 3 pitos si se te hubiera muerto una planta del balcón o si venías del entierro de una tía muy querida, por qué creés que me va a interesar ahondar en tus felicidades?
Me querés contar que te compraste un iphone?
Cogiste a la mañana?
Te aumentaron el sueldo?
Te pone contento la primavera?
Te pagaron el aguinaldo?
Te encanta el café de máquina y te pone feliz disfrutarlo en los vasos de plástico cancerígeno?

Buenísimo !!!!
Andá y contáselo YA a alguien que le importe...

Qué como los reconocés?
Son los que te preguntan algo del tipo "todo tranqui?" o "alguna novedad?"


Si te tiro "todobien?" no es para charlar. Es para distinguirte de la máquina de café nada más.

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miércoles, 21 de octubre de 2009

Buenos días, buenos días.

Temprano a la mañana:
- Buenos días
- Buenos días

A última hora del día:
- Hasta mañana
- Hasta mañana


Los demás saludos del día, son una cagada.

Cerca del mediodía uno no sabe si saludor con un buen día o con un buenas tardes.
Alguien dijo que si uno no almuerza, son buenos días. A quién se le puede ocurrir eso?
Le tengo que oler la pilcha y si tiene olor a fritanga le digo buenas tardes? Una locura.

Y si salgo al kiosco y vuelvo?
Hasta luego a la idea y quetal a la vuelta?
O miradita, sonrisa rápida pero forzada y cejas en alto?

Cuando son las 7 de la tarde (sobre todo en invierno) el cielo está oscuro y parece ser de noche. Pero uno no diría buenas noches para saludar a nadie, antes de las 8.30 de la noche.


No es joda esto, eh.
No es joda.


Yo voy a seguir pensando en el tema, probablemente decida dejar de saludar a todo mundo y así evitarme disgustos.

O hacer como Truman Burbank: Good morning, and in case I don't see ya, good afternoon, good evening, and good night!



No sé para que se inventó el televisor a colores con lo bien que se vive la vida en blanco y negro

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martes, 20 de octubre de 2009

El mismo amor, la misma lluvia

Todos los martes juego al tenis.
A la nochecita, en un buen horario.
Tengo tiempo suficiente para ir a casa, cambiarme, comer una banana y salir.


Todos los martes ruego al cielo para que llueva mucho y no se pueda jugar.


Solo así puedo cambiar la rutina que me disfraza de deportista, y me puedo vestir de casual comensal, saltearme el ejercicio y pasar directamente a la agradable cena familiar de todos los martes.


Por qué no dejo de jugar al tenis, entonces?
Todos los martes me pregunto lo mismo.

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viernes, 16 de octubre de 2009

Un techo para mi país

A mí, de los mingitorios disponibles en los baños públicos del mundo entero, me gustan más los que tienen techito, que los que no lo tienen.



Los de techito serían como estos:



Los sin-techo:



Además de que me hacen sentir más seguro, los de techito te permiten apoyar un codo y el codo apoyado te permite apoyar la cabeza en la mano... son mingitorios para la reflexión.


De los inodoros, prefiero fuertemente los que tienen mochila.

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Trabajo en negro

Hay gente que indudablemente necesita una persona que la ayuda en su casa para encargarse de limpiarla, de cocinar, de planchar o de otros menesteres de los que no puede ocuparse.


Hay gente que necesita pagarle a alguien para que vaya a su casa solo poder decir que "tiene una empleada".

Tal es el caso de la gorda indigesta, que además de decir que todas las que contrata son infradotadas (raro de ella, cuyos standares parecen bastante laxos), se la pasa hablando de "sus empleadas", "mi empleada de acá", "mi empleada de allá".

Gorda, no sos Amalita Fortabat así que vos no tenés empleados.
En todo caso contratás los servicios de una Sra. para que haga lo que no tenés capacidad natural para resolver: mantener en orden una casa.

No seas (tan) desagradable, querés?

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miércoles, 14 de octubre de 2009

Don´t worry, be hippie

Lo ideal para los pies, son zapatillas de lona que supieron ser blancas, gastadas a punto de deshilacharse, con cordones casi negros marcados por el tiempo y el uso.
Parecería ser que se compran así, porque nunca vi a ninguno con zapatillas blancas nuevitas.
O será que cuando se las compran las usan primero en la casa para ensuciarlas y después las sacan al mundo?

No importa la época del año, la temperatura ni la humedad, la ocasión ni el ámbito: los pantalones siempre son los mismos. Preferentemente serán jeans de marcas que ya no existen, arrancados con los dientes los dobladillos o enrollados en sus botamangas. También sale mucho el pantalón denominado "pulgoso" que no es otra cosa que una bolsa de arpillera pintada con rayas verticales de colores que hieren los ojos al mirarlos con detenimiento.

Las remeras con inscripciones ilegibles de dudosa convicción y los pulloveres de alpaca, con dibujos de llamas y guanacos se suceden con asombrosa descordinación. En verano, todos con el pullover coya. En invierno, apenas una remerita del Che.

En el caso de las mujeres una cartera sin grises en cuanto a sus dimensiones (enorme o minúscula) pero siempre de hilado artesanal y colores que NO hagan juego con el pantalón, cruzada sobre el pecho.
En el caso de los hombres, lo mismo... pero con el nombre de morral.



El cuello por lo general viste un adorno realizado en algún tipo de cuero oloroso pero "muy natural, muy de la tierra", algún hueso/diente de animal místico o un pañuelo con ribetes plateaditos y un nudo a punto de estrangular la nuez. Aquí no hay distinciones de sexo y todos los accesorios serán unisex, resultando tan repulsivos en hombres como en mujeres.

El pelo requiere un párrafo aparte (que será el próximo, claro).

El pelo suele estar debidamente zurcado por rastas mal hechas, ya sea que hayan sido enraizadas hace largo tiempo ya y el descuido y la falta de mantenimiento las haya converito en esa mierda que son hoy o que se haya puesto el cuero cabelludo a merced de un amigo "con buena vibra" pero con menos motricidad fina que la mínimamente requerida.
Parece que está mal visto andar con una rasta más o menos decente, entonces más vale hacerlas mal de una o esconderse debajo de una vincha hasta que la rasta se desmejore notoriamente y recién ahí descubrirse la capoccia.

Mejor ni me meto en el tema del olor, el contenido de las carteras/morrales, los libros, los billetes todos arrugados, la manera de caminar y lo que fuman porque se pudre.

En líneas generales, parece que estos especímenes buscan destacarse por el solo hecho de hacer las mismas cosas que el ser humano normal (vestirse, comer, peinarse) pero mal.

Muchachos, cortemos con la boludez: todos sabemos que cuando llegan a casa se sacan el disfraz y la peluca, se ponen las Havaianas y un shorcito de fútbol Adidas para luego poner las patas arriba de la mesa ratona y ver RSM con una cocucha fresca y unas talitas.

Basta de jugar a ser hippies... con esa actitud solo se van a levantar a minas mugrientas.
Y peludas.

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martes, 13 de octubre de 2009

Oficina de (no) alumnos

Esa facultad me resulta distante por un sin número de razones.
Para empezar la educación pública no es lo mío: mi pasaje por la UBA no tuvo escasa duración, fue aún menos fructífera y todavía menos gustosa ni agradable.

Las Ciencias Sociales quedan lejos de mi especialidad relacionada con los números, las abstracciones y lo técnico.

La humedad de las aulas, los carteles que empapelan las paredes y los hippies que llenan cada rincón, me generan (un poquitín) de rechazo.

Estaba ahí con un objetivo puntual: la obtención de preciados papeles por duplicado.

Eran apenas pasadas las 4 y la cola ya incluía al menos 10 personas.
Los minutos pasaban y las puertas no se abrían.

Se empezaban entonces a escuchar las primeras arengas de rebelión en forma de indirecta al aire.
"Son las 4.15 y no abren. A qué hora piensan abrir?"
"Están ahí adentro seguro".

Empezaba a imaginarme metido en una movilización de esas a la que son tan propensos por estos lares y no podía dejar de temblar. Justo yo, que ni siquiera me peleo cuando me cagan para subir al subte y prefiero quedarme en el molde, me estaban induciendo a un conflicto armado por una causa que no era mía.

La temperatura iba subiendo y los coleros de a poco me iban convenciendo.
Llegué a un punto de reflexión donde si me ponían en la mano una bomba molotov, la hubiera estrellado contra los vidrios de la "Oficina de Alumnos".



Por suerte empezaron a prenderse las luces... comenzaron a abrirse las puertas de la Oficina 200 y los ánimos de guerra empezaron a amainar.



40 breves minutos después se dignaron a atenderme, me lleve mis papeluchos y juré no volver a entrar a esa facultad endemoniada.

Al menos, hasta que me vuelvan a pedir un favor.

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Las pastillas del abuelo

Algunas mañanas, incluso antes de despertarme definitivamente, me tomo una aspirina para combatir el mareo/dolor cervical/dolor de cabeza de haber dormido pensando vaya uno a saber en qué.

Antes de ducharme una pastillita de esas chiquitísimas que vienen siendo para regularizar la flora y la fauna intestinal.
Es que tiene que ser media hora antes de desayunar...

Con el desayuno puede haber Vitamina B o complejos vitamínicos varios, depende si el día es par o impar. Como se toman día por medio, conviene hacerlo así.

A eso de las 12 me suele doler la panza.
Pero no de adentro para afuera, más bien de afuera para adentro.
Entonces una buscapina deja las cosas en su lugar.


Pero la puta, qué dolor de cabeza ma da la buscapina. No sé si será que me lleva toda la sangre del cuerpo al estómago o qué, pero después de que me duela la panza, me empieza a doler la cabeza.
Cosa de mandinga. Pero nada que no se resuelva con una buena cafiaspirina.


Antes de dormir, me tengo que sonar los mocos y tomar un antialérgico... que es más por las dudas que otra cosa.
De paso me lavo los dientes y me hago buches con el enjuague para dientes sensibles,



Mañana será otro día.
Pero a este ritmo, no sé si llego a los 30.

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jueves, 8 de octubre de 2009

La ley de la oferta y la demanda

Cuando los kioscos de diarios y revistas eran exactamente eso (kioscos de diarios y revistas) yo me preguntaba ¿quién carajo comprará la revista "Las Plantas Carnívoras y Ud." o "Aprendiendo a coser dobladillos en 24 tomos"?.

Después de los 12 fascículos mensuales de "Ser Economista hoy" comprendí que la ley de la oferta y la demanda es así de sencilla: si están ahí a la venta es porque alguien las compra.

Algunas publicaciones no pasan de la segunda o tercera entrega, porque bajo el viejo esquema narco-marketinero de que el primero te lo regalan y el segundo te lo venden, por lo general tienen un precio especial para la primera revistita y uno diferente para las próximas. Y convengamos que una cosa es pagar $5 por las primeras 2 de la colección "Piedras preciosas" que vienen con una réplica de una esmeralda y un zafiro y otra cosa es que te quieran cobrar 40 mangos la edición n° 3 que incluye un canto rodado
auténtico de Pza. Irlanda.

Me dejé tentar alguna vez por revistas de modelismo.
El modelismo de hacer avioncitos o autitos a escala, no el modelismo de libro en la cabeza, caminar derecho y vomitar después de cada comida. Según mis infantiles cálculos basados menos en la razón que en la esperanza, calculé que con 10 entregas eran suficientes para contar con todas las piezas de ese hermoso Rolls Royce a escala, si mantenían el ritmo de las primeras 3 revistas que trajeron el chasis y las 4 ruedas. Cuando caí en la cuenta de que las revistas 4 a 18 venían acompañadas de una tuerca o de un tornillo cada una, terminé por hincharme las pelotas y mandar todo al carajo: autito, modelismo, diariero y esperanza en la raza humana en general. Todo.

Con el tiempo, los kioscos se fueron plagando de revistitas aompañando CDs. Esto se explica por 2 motivos simples y claros:
a) las revistas tienen impuestos que el CD no, entonces te cobran 40 mangos la revistita de 1 hoja y el CD va de regalo;
b) Sergio Denis y demás impresentables ya no califican como música, por lo cual Musimundo y cadenas afines decidieron cerrarle definitivamente las puertas, en vez de tener que regalar al costo de un CD virgen discos prometedores que después de 4 años en las bateas no le vendían a nadie.

El paso siguiente en la involución, fueron los DVD.
Si, claro que era el paso lógico, pero también es lo más bajo a lo que se podía llegar.
Sentime una cosita, a quién se le ocurre darle a un diariero, un tipo que arranca a las 4 de la matina y que a gatas se sabe el precio del Clarín de los distintos días de semana, para que venda "Clásicos del cine de todos los tiempos", las primeras 2 temporadas de 24 (que ya tienen 8 años) y el DVD en Vivo del Grupo Red?. No hay chance de que funcione.

Lo que sí parece que está pegando es la edición multimedia de las basofias de otrora ("Coser, Lavar y Planchar Hoy" y "Cocina profesional en microondas") ahora con un DVD que te explica más clarito y más 2.0, la misma mierda que en la revista.

Estas cagadas funcionan, porque apunta a un público de viejas al dope, pero un poco quedadas con repecto a internet (para las cuales Youtube es un misterio) pero que con un machete que le dejó anotadito el hijo, te manejan el reproductor de DVD a la perfección.

Esto lo sé gracias a la instructiva publicación "Licenciando en marketing en 4 meses". Publicacion que siento que ya está dando sus frutos luego de 12 años de suscripción.

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Servicio de cadetería al pedo

Te banco incondicionalmente y para demostrarlo (si acaso hiceria falta), me voy a la loma del orto a buscar un papel de morondanga.

Ahora bien: si me mandás a las 14, a una oficina pública que atiende hasta las 13 y/o desde las 16, es el último no-trámite que te hago.



No sé para que se inventó el televisor a colores con lo bien que se vive la vida en blanco y negro

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Ornitología avanzada

En lo que a mirar mujeres se refiere, se complica mucho la cuestión cuando aparece una que a simple vista no queda claro si está buena, es pasable o es un bagre groso.

Porque si la mina está muy buena, de esas que se parten, que cuando las ves solo atinás a calcular cuánto tiempo te aguantan las patas para tenerla clavada contra una pared, merecen siempre una miradita.
Todos los días que uno se las cruce hay que pispearlas, sacarles una foto rapidita y listo.
La foto de hoy tal vez sea descartada, sobre todo si en el podio se almacena de ella alguna ocasión en bikini o un verano de livianas vestimentas.

Ojo, tampoco es cuestión de seguirlas como si uno fuera un helicóptero con un reflector, de esos que persiguen delicuentes en una persecución y ella fuera uno de esos delincuentes desaforados en un Ford Fairlane '78. Es una miradita, nada más.




Una mina muy muy fea, también merece diariamente una rápida inspección.
Es un placer casi masoquista, como olerse el sobaco antes de bañarse: No se puede sostener mucho tiempo, pero es inevitable hacerlo.
Es una miradita rápida. Es pispear qué se puso, cuánto se le notan los bigotes, si con ese pantalón el culo parece de 2 plazas o de 2 y 1/2 y listo.
A otra cosa.


El problema son las que están a mitad de camino.
El problema son las que un día decís "sí, le entro" y otro día decís "que hija de puta, me duele mirarla".
Porque con esas minas la mirada rápida no alcanza y es necesaria una inspección minuciosa, basada en una detallada revisión ocular del especímen en cuestión.

No se puede pelar una cámara de fotos y sacarle 40 para analizarlas con detenimiento, ni se la puede engañar para meterla en una Cámara de Gesell y observarla mientras se toman apuntes.
Hay que mirar, no hay otra.
Hay que ver si ese culo que hoy parece más o menos con forma es así por efecto del jean en particular, si es porque viene caminando rápido o porque nosotros estamos más calientes o "sensibles".

Epa, el pecho parece más tentador que otros días... será por un push-up, una de esas mierdas siliconadas que venden en Sprayette o es que en el verano el kilo de tetas es más barato y ésta se puso sin que yo me diera cuenta.

A veces es necesario un scaneo en tres dimensiones para calcular a ojo el tamaño de esa cintura que puede parecer de avispa desde un ángulo, de abeja desde otro y de oveja desde uno más cercano.

Lo mismo pasa con el vello facial que puede estar en exceso pero tenido para confundir, las cejas, la baranda en general. No es una cosa así de un minutito. Hace falta dedicarle tiempo.

El problema aquí, es que la sociedad suele ser bastante exigente y me animaría a decir que condenante, con este tipo de actitudes.
Porque si uno se pasa la mañana entera mirando de lejos a ese bagrecito, solo para darle la oportunidad de abandonar ese bote que puede resultar injusto y colocarla en el bando de minas más o menos pasables, será señalado por todos como si la hubiera embarazado de quintillizos y se hiciera el pelotudo.

A mí, esto de quedar como un pajero me parece por lo menos injusto.





No sé para que se inventó el televisor a colores con lo bien que se vive la vida en blanco y negro

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Escaleras

Descubrí que bajar las escaleras muy rápido, casi salticando, apenas apoyando los pies en un escalón para ya sacarlos (maldito Cortázar y sus instrucciones para subir las escaleras) me hacen sentir un nene.

Y si lo hago con traje y corbata, siento que soy un nene vestido de grande.

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martes, 6 de octubre de 2009

Cuestión de costumbre

Nos costó, pero nos acostumbramos a que los kioscos de revistas fueran cambiando de las tapas de "Tejer Hoy" con títulos del tipo "Hacete tu propia bombacha a crochette ¡y que no te pique!" hacia una y otra revista con Sritas. con la ya famosa pose de manos a la pared, columna cervical recortada hacia atrás entre la última vértebra lumbar y la primera sacra, mostrando el culo de manera que parece que te explota en la jeta.


No puedo dejar de compararlo con mis 12 años.
Cuando yo era chico, la manera más fácil de acceder a porneta era tener un hermano mayor que comprara revistas. Ahora, un nenito de 12 podría pararse en un kiosco, sacar fotos mentales y guardarla en su disco rígido para sacar de ahí material para atravesar la pubertad entera.

A lo que no me puedo acostumbrar, es a ver a 2 viejos codiándose delante de un kiosko y decir, disimuladamente "mirá ese culo, carajo!".

Un día a uno le va a dar un bobazo en el medio de la calle Florida y va a haber que pagarlo por nuevo.

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domingo, 4 de octubre de 2009

Puntos de vista

Cuando alguien se muere (esta vez es Mercedes Sosa, pero podría ser cualquier otro), es común escuchar la expresión "Nos dejó".


Qué tan egoísta hay que ser para enunciarlo de esa manera?

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Proporciones exactas

Se lo escucha una y otra vez al cortar el queso, al pelar las papas, al sacar de la heladera la crema de leche: "Con esta cantidad va a ser más que suficiente".


Entonces ponele menos.
Te pagan para que cocines en televisión, no para que inventes frases y un nuevo sistema de medidas.

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Distribuyendo la palabra del Señor

Si mientras disfrutamos una suculenta chocotorta, tenés la necesidad imperiosa de comentar que en que en tu casa solo se consume sal marina, no me vengas con que no pretendés evangelizar a nadie.

Mucho menos, si no sabés ni lo que consumís.

"No, usamos sal marina porque no tiene sodio".

Abrir la cabeza es otra cosa.

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viernes, 2 de octubre de 2009

Recetas de cocina con mi mamá

Arroz blanco alaquemeimporta:
Ponés la cantidad que vos quieras de arroz en una olla y le ponés mucha agua.
Más o menos un ratito después que hierve, apagás el fuego.
Vas a ver que el arroz se hincha, se hincha y cuando vos quieras lo sacás y ya está.


Flan de vainilla en sobrecito:
Calentás un litro de leche en una olla que no sea de acero inoxidable, ni enlozada, ni de teflón, ni nada de esas que tenés vos: cuanto más cualunque, mejor. Cuando está por hervir, le tirás el polvito en forma de lluvia y lo mezclás. Las compoteras así chiquititas son bárbaras, porque te salen justo 8 porciones.

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jueves, 1 de octubre de 2009

Renovación de stock

Estoy un poco preocupado: Quién va a atender en las oficinas públicas y quién va a manejar nuestros subtes en 20 años?

Todos los que lo hacen actualmente tienen al menos 48 años y por su calidad de vida, no creo que lleguen a los 70.

Los hombres se dividen en 2 grupos: los que se parecen al Puma Rodríguez o a Gorosito y los pelados. Las mujeres, las hay culonas y petisas o grandotas como un placard.


Tendrían que empezar a reclutar pasantes, porque se muere la especie, eh.

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