domingo, 11 de noviembre de 2007

Dulce y calentito



Depravados sexuales, abstenerse. Este humilde blog, por ahora, no se especializa en temas sexuales. Para eso está la gorda Rampolla que tan bien conoce la teoría sobre la cuestión.

Hay muchas cuestiones que dividen al mundo en mitades iguales. Hoy, nos convoca acaso el tema más difícil de todos: la comida.

Dulce y calentito podría ser el nombre de un servicio de Catering, cuyo fuerte sean las cositas dulces y en lo salado los calentitos. Éste, sería el primer servicio que yo no contrataría ni en pedo.Si en la guía hubiera un "Frío y saladito", marco directo y me tiro de cabeza.

Cuando a la tarde nos pica el bagre: Ud. prefiere un alfajor o un paquete de papas fritas? un paquete de galletitas Oreo o un pebete de JyQ?.


A mí me gusta más lo salado. Hoy por hoy, no me compro algo todas las tardes para matar el antojo, pero en mi época de gordo sin remedio, no había tarde en la que no salga un pancho con papitas, un paquete de palitos o un BigMac a $1,50 en el uno a uno.

No significa que después de cenar en vez de una fruta o un postre de chocolate, me mando una milanesa, pero sí es cierto que no muero por el chocolate en casi ninguna de sus formas, pero una picada completa realmente me puede.Lo mismo pasa con la comida caliente vs. la fría. Cuando digo que me gusta más la comida fría, no es solamente que prefieron una ensalada a un puré o un sandwiche a una tarta: también es que me gusta más comer la pizza fría al otro día que la calentita de la noche, que las empanadas de carne me caben más cuando ya se enfriaron y uno se puede mandar más de una al buche como si nada y sin riesgo de quemarse.

También como comida caliente. Me gusta mucho el arroz, la carne me vuelve loco y hago unos ravioles con tuco que son para chuparse hasta los codos.... sin embargo, sépanlo: si dejan unas papitas al horno en la heladera con el objetivo de calentarlas al mediodía siguiente, por mí no se calienten.